Historias Le Cadó: Isabel González

Isabel González es psicóloga especialista en oncología y colabora con la Fundación ofreciendo distintos talleres que muestran la importancia de la psicología en el acompañamiento del cáncer de mama. Con ellos busca ayudar a quienes lo sufren y dar herramientas para el soporte psicológico, de manera que afrontar la enfermedad y sus secuelas psico-físicas sean lo menos graves posible.

Más allá de conocer el trabajo que está desarrollando la Fundación Le Cadó, para ella hubo otros dos factores decisivos en el momento de colaborar. Por un lado, convivir día a día con el sufrimiento de las mujeres cuando son diagnosticadas y tratadas de cáncer de mama. Por otro lado, el deseo de compartir conocimientos que ayudan a sobrellevar la enfermedad a quienes desean escucharlos y que la Fundación sea un espacio para compartirlos. Tanto las pacientes como sus familias sufren a nivel psicológico y muchas veces se descuida esa salud mental, que es crucial para seguir adelante.

Para Isabel González, está claro que la investigación abrirá caminos para mejorar los tratamientos y es lo que al final salvará más vidas. Sin embargo, para conseguirlo hace falta dinero y alaba el compromiso de Le Cadó en este sentido, ya que aportan lo que modestamente consiguen con todo su trabajo. Esta labor ha supuesto para la protagonista un aprendizaje personal, el hecho de aportar y compartir los saberes que tiene sobre la psicooncología le hace sentir que crece como persona. Después de esto, insta a aquellos que buscan apoyar una buena causa a colaborar con la Fundación aportando tiempo, habilidades, conocimientos… porque es el camino para conseguirlo.

Olaparib, útil para evitar recaídas en pacientes con cáncer de mama y una alteración genética hereditaria en BRCA1 o BRCA2

En el tratamiento del cáncer cada vez tienen más protagonismo las terapias dirigidas, enfocadas a una característica molecular específica del tumor, que es clave para su invasión o división continua. Hasta ahora el uso de olaparib, fármaco que inhibe la proteína PARP, fundamental en los procesos de reparación del ADN, en cáncer de mama estaba restringido al contexto de la enfermedad metastásica en pacientes con una alteración genética en BRCA1 o BRCA2. Ahora, los resultados del estudio Olympia, recientemente publicados en The New England Journal of Medicine y que se presentan en la sesión plenaria del congreso virtual de ASCO, avalan la ampliación del uso de olaparib en pacientes diagnosticadas de cáncer de mama precoz.

Estos datos suponen un gran avance clínico, porque indican que las pacientes con una alteración genética hereditaria en BRCA1 o BRCA2 pueden recibir un tratamiento dirigido con un elevado impacto en su posibilidad de curarse, ya que estamos hablando de fases iniciales de la enfermedad, explica la Dra. Judith Balmaña, responsable del Grupo de Genética del Cáncer y miembro de la Unidad de Cáncer de Mama del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), que es co autora de la publicación, una de las investigadoras del estudio Olympia, formando parte de su comité de dirección en nombre del grupo Solti y que también ha sido la co-presidenta del subcomité de genética del estudio en representación de VHIO.

Reducción del riesgo de recaída
En este estudio Olympia participaron un total de 1.836 pacientes portadoras de una mutación germinal en BRCA1 o BRCA2 con un cáncer de mama precoz y HER2 negativo. En el estudio se evaluó la eficacia de olaparib después del tratamiento convencional de quimioterapia (neoadyuvante o adyuvante), cirugía y radioterapia para evitar la recaída de la enfermedad. “No hay que olvidar que estas alteraciones genéticas en BRCA1 o BRCA2 suelen predisponer al diagnóstico de tumores potencialmente agresivos y a una edad joven”, recalca la Dra. Balmaña.

El estudio aleatorizó a las pacientes en dos grupos, uno que recibió olaparib y otro al que se le administró placebo. En ambos casos junto a un tratamiento hormonal si el tumor era receptor hormonal positivo. Todo ello después de finalizar el tratamiento quirúrgico, de quimioterapia y radioterapia convencional. El tratamiento se administró durante un año y se pudo comprobar que, efectivamente, olaparib era capaz de reducir de forma significativa el riesgo de recaída. “Hemos demostrado que con olaparib se logra una reducción superior al 40% de tener una recaída de la enfermedad respecto al grupo control”explica la Dra. Judith Balmaña.

Analizando los datos obtenidos a los tres años y medio de seguimiento, se pudo ver que la reducción absoluta del riesgo de recaída a distancia en el grupo de olaparib era del 7% respecto al grupo control. “En cuanto a recaída de enfermedad invasiva, esto significa que a los tres años en el grupo con placebo un 77% de las pacientes no tenía una recaída, y este beneficio se amplió hasta el 86% en las pacientes tratadas con olaparib. Eso supone una importante oportunidad de curación y, sin duda, va a suponer un cambio en la práctica clínica”, añade la doctora. Asimismo, recalca que la toxicidad de este fármaco es baja y que su administración es oral, lo que permite mantener una buena calidad de vida.

Mutaciones en BRCA1 o BRCA2
Los genes BRCA1 y BRCA2 producen proteínas supresoras de tumores. Así, ayudan a reparar el ADN dañado y aseguran, por lo tanto, la estabilidad del material genético de cada una de las células. Sin embargo, cuando se produce una mutación en alguno de esos genes, la proteína correspondiente deja de funcionar correctamente. Por ello, hay más probabilidad de presentar alteraciones genéticas adicionales que puedan resultar en un cáncer. El riesgo de que una mujer pueda desarrollar un cáncer de mama o de ovario aumenta considerablemente si hereda una mutación dañina en el gen BRCA1 o en el gen BRCA2. Algunos estudios señalan que las mujeres que heredan alguna de esas mutaciones tienen hasta un 70% de posibilidad de presentar un cáncer de mama. En cambio, esta probabilidad es del 12% en la población no portadora.

Una mutación en los genes BRCA1 o BRCA2 supone un mayor riesgo de desarrollar cáncer. Además, también hace que los tumores sean especialmente sensibles al tratamiento con olaparib. Se trata de un inhibidor de la proteína PARP y es el primer tratamiento dirigido a las células tumorales que presentan una deficiencia en la vía de reparación del ADN por recombinación homóloga. Así son, precisamente, esos tumores con una mutación en BRCA1 o en BRCA2.

“Este fármaco ya había demostrado su utilidad en el tratamiento de pacientes con cáncer de mama metastásico. Con los resultados del estudio Olympia, se da un paso adelante y se demuestra que ofrece un importante beneficio en la posibilidad de curación en una etapa inicial de la enfermedad”, concluye la Dra. Saura, jefa de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Universitario Vall d’Hebron (HUVH). Asimismo, es jefa del Grupo de Cáncer de Mama del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO).

Este estudio ha sido posible gracias a una alianza para tirar adelante un estudio clínico entre la academia y la industria farmacéutica a nivel mundial. En el ámbito español el grupo cooperativo Solti y el grupo cooperativo Geicam de investigación en cáncer de mama han participado como grupos académicos que pertenecen a BIG (Breast International Group). “Conjuntamente han reclutado casi 122 pacientes, que representa casi un 10% del total“, según detalla el VHIO en un comunicado.

Vea la versión original en iSanidad.

La Fundación Le Cadó se suma a la Milla Europea

Este pasado 6 de junio, la Fundación Le Cadó tomó parte en la Milla Europea, una acción organizada por el Servei Municipal d’Esports y el Ayuntamiento de Burriana para promover una vida más activa en la ciudadanía. De las diferentes rutas marcadas, la convocatoria de la Fundación se dio en el carril ciclopeatonal del puerto.

Los participantes acudieron a la convocatoria llevando la camiseta de la Cursa de la Dona 2020, que no pudo llevarse a cabo debido a la situación de pandemia vivida en el momento. De esta forma, se hacia ver que, a pesar de que no pudimos realizar los eventos dicho año, seguimos trabajando para visibilizar la lucha contra el cáncer de mama.

Queremos agradecer la colaboración de todas las personas que han participado y animaros a que mantengáis la actividad física en vuestro día a día.

El uso de la ecografía en 3D mejora la detección precoz del cáncer de mama

El Servicio de Radiodiagnóstico del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid ha realizado un estudio sobre los beneficios del uso combinado de la mamografía y de la ecografía en 3D (Abus, por sus siglas en inglés) que demuestra que este tipo de tecnología tiene mayor resolución para la detección precoz del cáncer de mama.

Según ha explicado el centro hospitalario, en la investigación, realizada en colaboración con General Electric Healthcare que ha aportado la tecnología, han participado 250 pacientes de dos grupos distintos, uno centrado en menores de 35 años con sospecha por síntomas y otro en mujeres con mama densa y con riesgo de padecer cáncer de este tipo.

El estudio del 12 de Octubre, también ha concluido que el uso conjunto de estas dos técnicas incrementa asimismo la detección de cánceres de intervalo que son los diagnosticados tras un resultado negativo en una mamografía de cribado. Según ha explicado la responsable de la sección de Mama del Hospital, Sara Jiménez Arranz, “comparada con la ecografía manual, la tecnología Abus es una técnica de mayor resolución que nos aporta mucha más información y una mejor comparación temporal de las lesiones”.

Ventajas del Abus

Entre las ventajas de la tecnología, destaca que “ofrece imágenes en los tres planos del espacio: detección de cánceres de intervalo que es un plano nuevo en ecografía muy importante tanto para los cirujanos, como para el resto de los especialistas”.

Gracias a esta información, y en especial a las imágenes de plano coronal, es posible también dinamizar el ritmo de trabajo de los radiólogos. “La ecografía la realizan los técnicos de radiología, adquiriendo imágenes en el plano axial, y posteriormente los médicos radiólogos la visualizan en la estación de trabajo en los tres planos del espacio para hacer el informe clínico”, ha indicado el responsable de la línea de investigación en el grupo de mujeres menores de 35 años, Manuel Delgado.

Por su parte, la responsable de la investigación en mujeres con mama densa, Maria Teresa Fernández Taranilla, ha confirmado que “los datos que estamos obteniendo tienen muy buena correlación con respecto a la ecografía manual, por lo tanto, estamos viendo que vamos a poder sustituir esta ecografía manual por la automática en un futuro”.

Los radiólogos coinciden en que el uso de la tecnología Abus aporta importantes beneficios, ya que tiene mayor sensibilidad y precisión de las vistas de las lesiones y así “los oncólogos y cirujanos pueden ver mejor el tamaño de los tumores y llevar a cabo cirugías más precisas, conservadoras y con menor impacto estético en las pacientes”.

Primer hospital público español con Abus

El 12 de Octubre es el primer hospital público de la península ibérica que incorpora la tecnología Abus de ecografía en 3D de GE Healthcare.Según José Carmelo Albillos, jefe de servicio de Radiodiagnóstico del Hospital, este equipamiento está aportando importantes beneficios, tanto en el cribado de cáncer de mama, como en el diagnóstico de la mama patológica.

Potenciar Unidad de Mama

Este responsable también destaca el interés del centro en potenciar la Unidad de Mama, dándole un carácter más multidisciplinar e incorporando todas las técnicas posibles para mantener la vanguardia en la asistencia, docencia e investigación.

Vea la versión original en Redacción Médica

Historias Le Cadó: Isabel Ferrer

Isabel Ferrer es la directora general de la Caixa Rural de Burriana, cada año esta entidad bancaria hace una donación a la Fundación Le Cadó y este 2021 entregaron un cheque por valor de 600€. A esta iniciativa se suma la ayuda para organizar las Marchas contra el Cáncer y siempre están dispuestos a colaborar en todo aquello que sea positivo para la sociedad burrianense.

La Caixa Rural San José de Burriana, en palabras de su directora, está muy implicada con obras sociales porque destinan una parte importante de sus beneficios a causas de interés cultural, social y humanitario. Dado el proyecto que desarrolla la Fundación considera que es un gran destino de los fondos, pues todos ellos van a la investigación para el cuidado de personas. El cuidado humano es el primer objetivo que se debe marcar una sociedad y la Fundación vive para ello. Isabel Ferrer recuerda que Le Cadó con su trabajo busca soluciones a un problema tan grave como el cáncer de mama que afecta a tantas personas, especialmente mujeres.

Esta oportunidad ha hecho que Isabel Ferrer conozca más a las maravillosas personas que dirigen la Fundación. Así, admite que se alegra de la decisión de colaborar con un equipo que hacen de su trabajo una gran obra social. Es necesario contribuir en un proyecto como este porque se apoyan muchas causas a la vez y todas tienen un punto en común: el bienestar de las personas afectadas y su familia. La directora de Caixa Rural reconoce los importantes logros conseguidos por la Fundación, lo que aporta confianza al proyecto y significa que todas las aportaciones son bien gestionadas.

La vitamina C reduce riesgo de muerte por cáncer de mama, según un estudio

Un nuevo estudio científico ha puesto de manifiesto la importancia de la vitamina C para el ser humano. Conocido por todos es el poder de este micronutriente para fortalecer el sistema inmunológico, pero un nuevo trabajo de investigación pone de relieve una asociación respecto al cáncer de mama.

Este metaanálisis publicado en la prestigiosa GrassrootsHealth Nutrient Research Institute concluye que la vitamina C protege a las células del daño oxidativo que podría generar una progresión del cáncer. Además, este micronutriente también desempeña funciones dentro del sistema inmunológico para hacer frente a las infecciones y mejorar la respuesta inmunitaria.

En este sentido, este estudio arroja una luz de esperanza de forma natural para combatir el cáncer de mama. Y es que este tipo de cáncer es el más diagnosticado entre las mujeres en todo el mundo. Así, son muchos los estudios que han tratado de comprobar si la vitamina C podría tener una influencia positiva en las personas que a las que se le detecta este tipo de enfermedad.

En concreto, el metaanálisis que nos atañe se basó en analizar diez estudios diferentes en el que se organizaron un total de 17.696 casos de cáncer de mama. El objetivo era obtener una respuesta sobre el efecto de la ingesta de la vitamina C, tanto a través de la dieta, como mediante suplementos; así, como determinar la tasa de supervivencia de las mujeres con cáncer de mama.

Los resultados del metaanálisis fueron concluyentes. Los participantes que tomaron suplementos de vitamina C tras ser diagnosticados con cáncer de mamá mostraron un 19% menos de riesgo de mortalidad en general y un 15% menos de probabilidades de fallecer a causa del cáncer de mama; con respecto al resto de participantes en el estudio.

Si bien, los investigadores intentan profundizar en los resultados del estudio para explicar hasta que punto es beneficiosa la ingesta de vitamina C frente al cáncer de mama. Por cada 100 mg al día de vitamina C incluido en la dieta, el riesgo de morir en general disminuye en un 27% y en un 22 % en el caso del cáncer de mama.

Es decir, este profundo trabajo de investigación no solo demostró que la ingesta de vitamina C reduce el riesgo de mortalidad en los pacientes con cáncer de mama, si no que también disminuye las probabilidades de mortalidad en general.

El estudio no pudo descubrir exactamente el nivel de ingesta de vitamina C asociado con un menor riesgo de mortalidad. Es decir, solo se pudo determinar que la ingesta elevada de este micronutriente se vinculó con un riesgo disminuido de morir.

Una dosis diaria bastante más elevada de lo que aconseja el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos. Así, desde el Instituto Linus Pauling aconsejan prácticamente sextuplicar la ingesta de vitamina C de una persona adulta para que este micronutriente cause efectos beneficiosos frente a determinadas enfermedades o afecciones de salud.

Vea la versión original en tododisca.

Un fármaco mejora el tratamiento del cáncer de mama hereditario

El olaparib, un fármaco que daña el ADN de las células tumorales y además les impide repararlo, mejora el tratamiento de los cánceres de mama que tienen mutaciones en los genes BRCA1 o BRCA2. Estas mutaciones son las más frecuentes en los cánceres de mama hereditarios.

Según un estudio internacional publicado ayer en la revista The New England Journal of Medicine , el riesgo de que aparezca un nuevo tumor en un plazo de tres años es un 38% más bajo en pacientes tratadas con olaparib que en pacientes que recibieron placebo. El olaparib, que se toma por vía oral a lo largo de un año, se suma a la cirugía, la radioterapia o la quimioterapia que hayan recibido las pacientes.

“Aumenta de manera significativa las perspectivas de curación para estas pacientes”, declara Judith Balmaña, investigadora del Instituto de Oncología de Vall d’Hebron (VHIO) y coautora del estudio. “Los resultados van a cambiar la práctica clínica en dos sentidos. Por un lado, se ampliarán los casos en que estará indicado hacer un estudio genético para comprobar si un tumor tiene mutaciones de BRCA1 o BRCA2, aunque la persona no tenga antecedentes familiares de este tipo de cáncer. Por otro, en casos en que se detecten estas mutaciones, estará indicado el tratamiento con olaparib”.

Los tumores con mutaciones en los genes BRCA1 o BRCA2 representan aproximadamente un 5% de todos los cánceres de mama. Suelen iniciarse a edades tempranas, a menudo son tumores agresivos y disponen de opciones limitadas de tratamiento. A diferencia de otros tipos de cáncer de mama para los que se han desarrollado fármacos específicos en los últimos 25 años, estos tumores siguen tratándose con quimioterapia, radioterapia y cirugía a falta de terapias más dirigidas.

“El olaparib es la primera terapia dirigida para estos tumores”, destaca Balmaña. Ya está aprobado para pacientes de cáncer de mama con mutaciones en los genes BRCA y metástasis, así como para otros tipos de cáncer. Sin embargo, aún no se había ensayado en pacientes que no tienen metástasis y que pueden conseguir una curación completa.

En el estudio Olympia publicado ayer han participado 1.836 pacientes de una decena de países que habían sido tratadas por un cáncer de mama con mutaciones en uno de los genes BRCA y que no tenían metástasis. Entre las que recibieron placebo, a un 22,9% se les detectó un nuevo tumor en los tres años siguientes. Entre las que recibieron olaparib, el porcentaje se redujo a un 14,1%, lo que representa una reducción de riesgo del 38%.

Los efectos secundarios fueron similares a los registrados en ensayos clínicos anteriores con olaparib. Detalles adicionales del ensayo clínico se presentarán el domingo en la sesión plenaria del congreso anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica.

“Los primeros años son el periodo en que es más probable que aparezca una recidiva con este tipo de tumor”, destaca Balmaña. “Si no aparece en este periodo, las posibilidades de curación son altas”.

La investigadora del VHIO, única coautora española del ensayo clínico, destaca que este tipo de estudios no serían posibles sin la colaboración de una extensa red de hospitales. Por parte española han colaborado el grupo de investigación clínica SOLTI y el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam).

Vea la versión original en La Vanguardia.

La cirugía con incisiones invisibles previene las lesiones de los linfáticos superficiales y reduce las cicatrices en los tumores de mama

El cáncer de mama es el tipo de enfermedad oncológica que más afecta a las mujeres. Su diagnóstico repercute de manera significativa en las mujeres tanto a nivel psicológico como a nivel físico debido en gran parte a los tratamientos e intervenciones a los cuales deben ser sometidas.

En la actualidad, las técnicas mínimamente invasivas permiten reducir el tamaño tumoral con una agresión quirúrgica menor que la cirugía convencional, evitando las deformidades de la mama, manteniendo más tejido sano y reduciendo las cicatrices. Tal como explica la doctora Belén Merck, cirujana de mama de Vithas Castellón, “hay que tener en cuenta dos factores importantes en los que se sustenta el éxito que estamos consiguiendo en las intervenciones de cáncer de mama en Vithas Castellón. Por una parte, los comités multidisciplinares de tumores de mama que se están realizando periódicamente para adoptar decisiones conjuntas sobre los tratamientos más idóneos para cada paciente. Por otro lado, en la cirugía del cáncer por incisión invisible, que es una técnica oncoplástica”.

“En esta técnica, -explica la profesional-, lo que realizamos es una única incisión o herida para llegar a la mama y a la axila. Esto ayuda a prevenir las lesiones de los linfáticos superficiales y reduce la incidencia de seroma que es la acumulación de líquido después de hacer una biopsia de ganglio centinela. Además, mejora la movilidad del hombro, es decir, que evita el bloqueo del “hombro congelado” y además oculta la cicatriz ocasionada por la intervención”.

“Esta cirugía de puerto único la podemos realizar porque en el hospital trabajamos en programas de cribado mamográficos que nos permiten realizar diagnósticos de tumores que, aunque sean malignos, realmente podemos aplicarles estas técnicas que son muy adecuadas incluso si el tamaño del tumor es muy pequeño o después de haberlos tratado con quimioterapia” y subraya que  “realmente ofrece un resultado muy superior que las técnicas tradicionales”.

Comités de mama

En Vithas Castellón, se realizan reuniones multidisciplinares que cuentan con la participación de los profesionales que intervienen en el tratamiento de las pacientes con este tipo de tumor. Es a este equipo multidisciplinar de profesionales a quien compete estudiar conjuntamente las distintas estrategias terapéuticas y decidir cuál es el tratamiento óptimo de una forma personalizada para cada paciente.

Vea la versión original en El Periodic

Historias Le Cadó: Pau Pérez

Pau Pérez Rico es el Director de Comunicación y Relaciones Institucionales de la Comunidad Valenciana en El Corte Inglés. Él fue nexo de unión para la colaboración entre la Fundación Le Cadó y El Corte Inglés de Castellón, convirtiéndose en punto de inscripción y venta de camisetas para las Marchas contra el Cáncer castellonenses.  A su vez, allí se celebra la comunicación oficial del evento y facilitan los arcos hinchables que marcan la casilla de salida de la carrera.

Desde esta empresa siempre han estado junto a las personas que necesitan apoyo y a lo largo de su historia se han sumado a distintas causas. Cuando Pau Pérez descubrió el fin encomiable de Le Cadó supo que había que unirse por la gran labor que presta en la lucha contra el cáncer de mama. Además, reconoce la importancia de que exista esta Fundación y su compromiso con la investigación porque junto a la prevención es el factor más importante para contener la enfermedad. Para Pau Pérez es vital luchar contra ella porque causa un daño terrible a una parte fundamental de la sociedad como son las mujeres.

La investigación y prevención son fundamentales para luchar contra el cáncer de mama que cada año causa un daño terrible a las mujeres”

Esta experiencia ha permitido a Pau Pérez conocer el valor humano de la Fundación Le Cadó y descubrir personas con un propósito fijo dedicadas a ayudar a los demás. Esto es lo que da sentido a este proyecto y el protagonista destaca la satisfacción de ver a tanta gente dedicada en una causa que nos preocupa a todos. Con ver desfilar a miles de personas por las calles de Castellón en una marcha festiva a la par que comprometida es un argumento suficiente para apoyar esta iniciativa. Esta acción se repite cada año y siempre gana adeptos, para Pau Pérez sobran las palabras y considera que los hechos hablan por sí mismos.

Historias Le Cadó: Leti Mora

Como profesional del sector audiovisual, Leti Mora trabajó en los vídeos conmemorativos del décimo aniversario de la Fundación Le Cadó disponibles en todas las redes sociales. A esto se suma el rodaje de las distintas marchas contra el cáncer de Castellón con las grabaciones que plasman la unión y la marea rosa para el recuerdo. Ella misma confiesa que fue muy especial y lo guarda para siempre porque es emocionante ver la cantidad de personas que se suman por una misma causa.

Siempre ha estado presente en estos momentos tan significativos para la Fundación Le Cadó y ahora ya forma parte de ella. Cuando descubrió la historia que hay detrás de la creación de Le Cadó algo cambió en Leti Mora y reconoce que no se puede hacer otra cosa que colaborar. Cada persona que conoces de este proyecto es más especial, la voluntariedad con la que trabajan y el espíritu de equipo es increíble, pues pocas veces se encuentra esta humanidad.

“Gracias a la Fundación he descubierto lo emocionante que es ver la cantidad de personas que unen sus esfuerzos para luchar contra el cáncer de mama”

El cáncer de mama es una de las enfermedades graves más habituales entre las mujeres y según Leti Mora la investigación es el mayor aliado para disminuir sus efectos. Esta es fundamental para mejorar los tratamientos y disminuir su agresividad, ya que alteran la vida de la paciente. La fotógrafa destaca que cada aportación sirve para apoyar especialmente a las mujeres que están pasando por ello, pero también ayuda al resto que en un futuro pueden sufrirlo.

El hecho de colaborar con la Fundación Le Cadó es desde luego una buena forma de luchar contra el cáncer de mama. Para Leti Mora los componentes de la Fundación son una gran familia con un espíritu luchador y valiente para conseguir un objetivo en común, mejorar la vida de muchas mujeres. Después de trabajar con ellos, ha descubierto que esto se refleja en sus campañas alegres, divertidas y con una actitud muy positiva. Sin duda volvería a hacerlo porque colaborar con ellos siempre es fácil, amable y satisfactorio a nivel personal.