avances mamografías

Más rápidas, más seguras y menos dolorosas: así son las nuevas mamografías

“El aparato es diferente y no me ha dolido tanto”. Esto comenta Julia (nombre ficticio) de su última revisión: fue diagnosticada de cáncer de mama hace una década y se somete a una mamografía anual. A la tensión de la incertidumbre se le sumaba el dolor que el aparato le provocaba al comprimir la mama. Pero cambió de centro, el aparato era distinto y se llevó una agradable sorpresa.

No es la única. “En mi hospital cambiamos el mamógrafo hace cinco años y empezamos a notar que las mujeres que venían a hacerse su revisión no se quejaban tanto: venían asustadas y quedaban sorprendidas“, comenta Myriam Montes, radióloga del madrileño Hospital Clínico San Carlos.

Ella misma subió un vídeo a su Instagram mostrando las ventajas de la nueva máquina. La antigua ya había cumplido más de 15 años de servicio pero en su momento también supuso una revolución: “Fue de las primeras digitales que llegaron a España”, explica a EL ESPAÑOL.

En estas últimas dos décadas, la tecnología para realizar las mamografías ha avanzado enormemente. Tanto, que según Montes, portavoz de la Sociedad Española de Radiología Médica, las guías europeas de cribado del cáncer de mama, que se basan en “ensayos clínicos que se hicieron hace 20 años”, han quedado algo obsoletas.

En la actualidad, el cribado del cáncer de mama está recomendado para todas las mujeres entre 50 y 70 años. Cada 24 meses, se realizan la prueba, colocando la mama en una plancha que la aplasta para tomar imágenes radiológicas de la misma. Más allá de la colocación, la prueba dura solo unos segundos, pero para muchas mujeres parecían eternos.

Los nuevos aparatos, que comenzaron a llegar a nuestro país justo antes de la pandemia, son capaces de conseguir mejores imágenes, de forma más rápida y con menos presión en la mama. Además, el nivel de radiación es menor.

Aunque el nivel de radiación para lograr una imagen mamográfica es mínimo y no entraña, por sí solo, ningún riesgo, siempre es recomendable reducirlo en la medida de lo posible. Al irradiar menos la mama, Montes ve una oportunidad para ampliar la edad de cribado de forma segura, sobre todo en mujeres jóvenes, que “son más susceptibles a la radiación porque las células se replican más rápido en los tejidos jóvenes”, lo que aumentaría –teóricamente– la probabilidad de aparición de mutaciones causadas por la radiación.

De hecho, la Comisión Europea recomienda bajar la edad de cribado a los 45 años (en EEUU es a partir de los 40) y así se hace en varias comunidades españolas, si bien el panorama es muy heterogéneo e incluso puede diferir entre provincias.

De igual forma, el número y tipo de aparatos de mamografía no es nada uniforme, lo que condiciona su uso, pero la radióloga apunta al gran cambio que ha habido en los últimos años con la renovación de los equipos tecnológicos en la sanidad pública. Gran parte de los hospitales cuentan ya con mamógrafos avanzados y ya no necesitan externalizar este servicio a otras clínicas, tanto públicas como privadas, de forma que “los mismos radiólogos que hemos visto la mamografía vamos a citar a la mujer para la biopsia y en el mismo hospital se puede realizar el tratamiento y el seguimiento”.

Las controversias de las mamografías

El oncólogo César Rodríguez apunta que la realización de mejores cribados permite detectar y tratar antes los tumores. “Esto se traduce, en líneas generales, en tratamientos menos agresivos y una mayor posibilidad de curación”.

Además, con el aumento de la esperanza de vida, se está planteando la posibilidad de ampliar la edad de cribado por arriba, hasta los 75 años. Por debajo de los 45, sin embargo, “no está demostrado que sea una técnica rentable: el número de mamografías necesarias para detectar un solo tumor sería muy elevado, su impacto es pequeño”. Solo se vigilan aquellas mujeres con más riesgo que la población general: las que tienen antecedentes familiares o predisposición genética, por ejemplo.

Por encima de los 70 se realiza en las que han pasado ya por un cáncer de mama, que acuden a revisiones de forma periódica (generalmente, una vez al año en lugar de los dos del cribado general).

Con todo, Rodríguez, que trabaja en el Hospital Universitario de Salamanca y es vicepresidente de la Sociedad Española de Oncología Médica, reconoce que, pese a mejorar en los diagnósticos precoces, “sigue habiendo controversia sobre el impacto del cribado en la población”. Aunque algunos estudios muestran reducción de la mortalidad por cáncer de mama, en este punto no hay una conclusión definitiva.

Mientras tanto, el avance de los equipos hace más agradable pasar por este proceso de forma periódica. Aunque la mayoría de mujeres en el rango de edad recomendado acude a hacerse la mamografía, la ‘amabilidad’ de los nuevos aparatos puede contribuir a eliminar reticencias.

Myriam Montes apunta que el boca-oreja contribuye a ello, “las mujeres están muy informadas”, y aunque la pandemia supuso un parón, se ha regresado a la normalidad. “Existe la típica frase de ‘si esto fuera para un hombre ya se habría avanzado‘. La realidad es que se ha avanzado muchísimo y ahora los mamógrafos tienen que comprimir menos para obtener una imagen diagnóstica de calidad altísima, mucho más nítida. Nos podemos adelantar a un diagnóstico de cáncer de mama años antes de que aparezcan síntomas”.

cursa de la dona Burriana

VII Cursa de la Dona en Burriana

  • La Cursa de la Dona 2023 en Borriana alcanza más de 1.200 participantes en su séptima edición
  • La “marea rosa” ha conseguido recaudar un total de 7000 euros que se destinarán un año más a la investigación para la lucha contra el cáncer de mama

La séptima edición de la Cursa de la Dona de Borriana celebrada hoy ha vuelto a superar todas las previsiones en cuanto a participación, ya que más de 1.200 personas se han dado cita a media mañana en la Piscina Municipal de la ciudad para tomar parte de un evento en el que ha vuelto a destacar el carácter solidario, y que han convertido la jornada en un modelo de sororidad, de unión y de reivindicación justa.

Gracias a la participación en la “marea rosa” de Borriana, con esta carrera solidaria coordinada por la Fundación Le Cadó se ha conseguido recaudar un total de 7.000 euros que se destinarán íntegramente, un año más, a proyectos de investigación para la lucha contra el cáncer de mama de repercusión nacional.

La cursa es un encuentro popular de 5 km de “solidaridad” a través del vial del Port hasta la zona marítima y vuelta hasta Borriana, en cuya organización colabora activamente el Servei Municipal d’Esports (SME) de Borriana, que ha organizado una vez más unas actividades físicas previas a la salida y al finalizar la prueba no competitiva.

Una jornada de sororidad, de estar unidas y de reivindicar causas justas alrededor, además de un día de reivindicación como es el Día Internacional de la Acción por la Salud de las Mujeres.

Antes de la salida de la cursa, representantes de la corporación municipal y de la Fundación Le Cadó han entregado dos cheques de los 7.000 euros recaudados al director de la Cátedra Actividad Física y Oncología de la Fundació José Soriano Ramos de la UJI, Eladio Collado y al representante del GEICAM para seguir financiando el proyecto de la CAFO-UJI e iniciar el proyecto EMBARCAM, Fundación Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama.

Además, durante los momentos antes al inicio de la cursa, se ha agradecido a todos los departamentos municipales implicados, a las entidades y empresas colaboradoras su compromiso social, así como el respaldo para seguir haciendo crecer cada año una Cursa de les Dones no competitiva que ya en su séptimo año ha aumentado la participación pasando de 400 el primer año a las más de un millar en esta edición.

La presidenta de la Fundación Le Cadó, Elvira Monferrer, ha mostrado su satisfacción por la “masiva participación” y ha destacado la “extraordinaria implicación de la sociedad burrianense”, que ha demostrado una vez más ser “generosa y solidaria con esta iniciativa” en la que colaboran de forma “muy proactiva”.

Las personas participantes que han completado la marcha hasta llegar a la línea de meta situada junto a la Piscina Municipal han podido disfrutar de los alimentos y refrigerios, y del reparto de los diferentes productos ofrecidos por las marcas colaboradoras en el evento.

Así, con las emblemáticas camisetas de color de rosa diseñadas por el burrianense Vicent Guerola, y la alegría de las más de mil mujeres y muchos hombres que se han dado cita en la Cursa de la Dona, se ha cerrado una nueva y multitudinaria edición que, muestra la fuerza y las ganas de las mujeres de nuestra ciudad por ser protagonistas de eventos sociales, como en este caso que une deporte y solidaridad.

embarazo cáncer de mama

Un estudio determina que parar la terapia endocrina para quedarse embarazada no eleva las recaídas en cáncer de mama

En mujeres con cáncer de mama hormonosensible que desean ser madres, pausar la terapia endocrina para intentar quedarse embarazadas durante un tiempo máximo de dos años no incrementa el riesgo de recaídas a corto plazo. Así lo avalan los resultados del ensayo clínico Positive, publicado en The New England Journal of Medicine, y coordinado en España por el Grupo Solti, de investigación clínica en cáncer, y por el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam).

Tras tres años y medio de seguimiento, los resultados, que ya que se avanzaron en el último congreso internacional San Antonio Breast Cancer Symposium 2022 (SABCS), muestran un riesgo de recaída en estas pacientes del 8,9%, frente a un 9,2% en pacientes que no pausaron la terapia en busca de un embarazo.

Positive es el primer estudio prospectivo diseñado para dar respuesta a mujeres que se diagnostican de cáncer de mama en edad temprana y sin haber completado su deseo de ser madres. Se estima que entre el 40% y el 60% de las pacientes a las que se diagnostica un cáncer de mama a los 40 años o antes están preocupadas por su futura fertilidad.

CÁNCER DE MAMA CADA VEZ MÁS FRECUENTE EN MUJERES JÓVENES

“Sabemos que el cáncer de mama es cada vez más frecuente en mujeres jóvenes y, por tanto, coincide con el deseo de ser madre de muchas de ellas. Por esta razón, fertilidad y embarazo resultan preocupaciones importantes tanto para las pacientes oncológicas como para los investigadores”, comprende Manuel Ruiz Borrego, co-coordinador del estudio Positive en España, miembro de la Junta Directiva de Geicam y jefe de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.

Este nuevo estudio “abre la posibilidad de un embarazo seguro para aquellas pacientes con cáncer de mama que lo deseen, una vez que han realizado al menos 18 meses de terapia endocrina adyuvante”, señala Cristina Saura, coordinadora del estudio en España, miembro de la junta directiva de Solti y jefa de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Vall d’Hebron y VHIO.

Hasta ahora la recomendación era empezar a buscar el embarazo pasados un mínimo de 5 años tras haber superado el cáncer de mama, y siempre que no hubiera habido recaídas. Según la experta, los resultados de Positive “pueden cambiar las guías clínicas actuales”, pero advierte de que “el seguimiento a largo plazo de estas pacientes será fundamental para corroborar estos datos”.

El presidente de Geicam, Miguel Martín, que es además jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Gregorio Marañón, advierte de que “este estudio da tranquilidad a los médicos y pacientes que ya anteriormente se decidían a una interrupción de la terapia endocrina, después de al menos dos años, para permitir un embarazo”.

“Ya se sabía que el embarazo no empeoraba el pronóstico de las mujeres con cáncer de mama. También muchos oncólogos debatíamos con las pacientes la posibilidad de interrumpir transitoriamente el tratamiento endocrino para permitir un embarazo muy deseado y lo hacíamos, pero ahora hay evidencia prospectiva que apoya esa opción”, sostiene el oncólogo.

ASÍ HA SIDO LA PARTICIPACIÓN ESPAÑOLA EN EL ESTUDIO

Para examinar el impacto de la pausa de la terapia endocrina con el objetivo de buscar un embarazo, el estudio Positive incluyó a 518 mujeres de 42 años o menos, procedentes de veinte países, con cáncer de mama de receptores hormonales (RH) positivos que deseaban quedarse embarazadas.

De estas, 72 pacientes procedían de 18 hospitales españoles y fueron reclutadas a través de los grupos de investigación Solti y Geicam.Antes de pausar su tratamiento, las pacientes habían completado entre 18 y 30 meses de terapia endocrina adyuvante. Además, se instó a las participantes en el ensayo que reanudaran el tratamiento endocrino tras un intento de embarazo o un paréntesis de su tratamiento hormonal de dos años para intentarlo.

Los datos actuales surgen tras un seguimiento de 3 años y medio. No obstante, los investigadores continuaran el seguimiento de las participantes en el estudio durante 10 años.

Curiosamente los resultados muestran tasas de concepción y parto que están a la par o son superiores a las de la población en general; de 497 mujeres a las que se hizo seguimiento para ver si se habían quedado embarazadas, 317 dieron a luz al menos a un hijo y nacieron un total de 365 niños, debido a embarazos múltiples o consecutivos.

CÁNCER DE MAMA Y EMBARAZO

Positive se inscribe en una línea de investigación que busca dar respuesta a las cuestiones sobre salud reproductiva de las pacientes con cáncer de mama. Se investiga además si existe una relación de causalidad entre el embarazo y la aparición de un cáncer de mama.

Así, el estudio Embarazo y Cáncer de mama (Embarcam), liderado por Geicam, permitirá tener una foto del llamado cáncer de mama gestacional, diagnosticado durante el embarazo o el año siguiente, con el objetivo de prever esta situación y diseñar estrategias encaminadas a lograr embarazos seguros.

En esta línea se quiere determinar la utilidad de la leche materna para la detección precoz del cáncer de mama. “Con el estudio de casos concretos hemos concluido que la leche materna serviría para detectar mutaciones cancerosas de forma más precoz que a través de la sangre, por ser la concentración de ADN mucho más elevada en la leche materna”, afirma Saura.

“Para confirmar estos datos, prevemos poner en marcha MMaterna, un estudio internacional cuyo objetivo será analizar el caso de las mujeres que se embarazan siendo mayores de 40 años o siendo portadoras sanas de una mutación genética que aumente su riesgo de padecer cáncer de mama para ver si somos capaces de diagnosticar el cáncer de mama de manera más precoz en el postparto a través de la lecha materna que mediante las muestras de sangre o estudios radiológicos convencionales”, resalta.

taller saludable

Taller saludable: reconstrucción y aumento mamario

El pasado sábado 22 de abril se celebró en Spai Fundació (Burriana) un nuevo taller saludable y solidario a cargo de la Fundación Le Cadó. Un evento realizado en colaboración con el Hospital Clínic Universitari de València y la Diputació de Castelló.

El taller giró en torno a la cirugía del pecho, bajo el nombre: “Diferentes tipos de reconstrucción y aumento mamario”.

Fue el doctor Carlos Tejerina Botella, jefe del Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora del Hospital Cínico de Valencia, el encargado de impartir el taller. En su presentación, Tejerina fue más allá de la mastectomía, y quiso mostrar las diferentes posibilidades que ofrece la cirugía del pecho en la actualidad.

Además, el doctor aprovechó la ocasión para hablar sobre su trayectoria profesional y su experiencia en quirófanos. En definitiva, el evento fue todo éxito. Los conocimientos del sanitario y su cercanía fueron capaces de captar la atención de todos los allí presentes.

Un nuevo taller saludable y solidario

Estos talleres llega más allá de lo informativo y dan a conocer la labor de la Fundación entre un mayor público. Hombres y mujeres interesados en apoyar la labor de la Fundación llegan a estos talleres con la intención de disfrutar de estos evento, pero sobre todo con la intención de colaborar con la organización. Cabe recordar que la Fundación Le Cadó recauda fondos para financiar diversas investigaciones del cáncer de mama mediante su proyecto Flor de Vida. En la actualidad, la Fundación Le Cadó colabora en diferentes investigaciones del INCLIVA, Instituto de Investigación Sanitaria, y la Cátedra de Actividad Física y Oncología de la Universitat Jaume I.

La Fundación continúa así el propósito que le impulsó a organizar estos talleres: acercar a la sociedad diferentes temáticas interesantes del ámbito de la salud de la mano de expertos en la materia.

mastectomía

El 80% de los casos de cáncer de mama se tratan sin necesidad de mastectomía

El diagnóstico precoz ha elevado al 80% los casos de cáncer de mama abordables con cirugía poco invasiva, sin necesidad de recurrir a la mastectomía. Esa es uno de los titulares que el hospital Reina Sofía dio a conocer este jueves en la segunda edición de unas jornadas organizadas para dar a conocer las novedades sobre estos tumores con motivo del Día Mundial, que se celebra el próximo 19 de octubre. La directora de la unidad de gestión clínica de Radiodiagnóstico del hospital, Marina Álvarez, destacó el interés del centro no solo por informar de los avances en diagnóstico y tratamiento sino por abrir el debate a la ciudadanía para conocer sus dudas, sus miedos y la incertidumbre que sienten en torno al cáncer de mama, el más frecuente en las mujeres, y a las pruebas que se realizan a las pacientes.

El aumento de los casos que no requieren mastectomía se debe al importante avance tecnológico en los sistemas empleados tanto en la detección como en el tratamiento de los tumores, detalló Álvarez. El trabajo multidisciplinar y coordinado de profesionales de distintas áreas también está contribuyendo a abrir cada vez más posibilidades de tratamientos más precisos y ajustados a cada paciente. «Cada vez tenemos más opciones terapéuticas a nuestro alcance y de lo que se trata es de estudiar cuál es la más adecuada a cada caso», incidió.

Entre las técnicas incorporadas en los últimos años destaca el uso de la inteligencia artificial para la detección de lesiones muy pequeñas, casi indetectables, que pueden indicar el inicio de un tumor o la incorporación de la mamografía con contraste, una prueba funcional que permite mejorar la detección de lesiones tumorales, ya que ofrece resultados más sensibles y precisos que la mamografía convencional.

En cuanto a los tratamientos, las técnicas de ganglio centinela o el uso de semillas magnéticas son algunos de los ejemplos de los que también se habló en el encuentro, en el que participaron radiólogos, oncólogos médicos, oncólogos radioterápicos, cirujanos, médicos nucleares, anatomopatólogos y enfermeros, entre otros, participaron en las dos mesas redondas organizadas por el centro. También hubo lugar para dar a conocer el lugar de trabajo de los profesionales gracias a una serie de vídeos grabados en las diferentes unidades del hospital.

Por su parte, el oncólogo del hospital Reina Sofía Juan de la Haba recordó que el programa de diagnóstico precoz se activó en el año 1999 y desde entonces, el volumen de mujeres que acceden a las mamografías periódicas se ha ido ampliando, lo que ha mejorado el diagnóstico precoz.

Vea aquí la versión original.

tratamiento endocrino

Científicos de Granada demuestran el importante papel de la terapia endocrina en el tratamiento del cáncer de mama

El grupo de investigación de Oncología Traslacional e Integrativa del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada (ibs.GRANADA), liderado por Isabel Blancas López-Barajas y Sergio Granados, ha colaborado en la realización de un ensayo clínico internacional que ha demostrado que la terapia endocrina, combinada con un fármaco, utilizado en el cáncer de mama llamado Abemaciclib, supone un tratamiento de mayor seguridad y mejores resultados percibidos por las pacientes en el tratamiento del cáncer de mama de alto riesgo en sus etapas iniciales.

El cáncer de mama de alto riesgo con receptores de estrógenos positivos y Her-2 negativo, puede venir definido por distintos factores como estadios de presentación más avanzados, índices de proliferación celular más altos o altos grados de diferenciación celular.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

En estudios previos ya se demostró en pacientes con cáncer de mama de alto riesgo con receptores de estrógenos positivos y Her-2 negativo, una mejora clínicamente significativa en la supervivencia libre de enfermedad invasiva con el tratamiento combinado de Abemaciclib con terapia hormonal, pero no se reportaba exhaustivamente la valoración de los tratamientos y de los resultados por cada participante en el estudio.

Además, este análisis ha contribuido a establecer con más precisión la seguridad del uso de Abemaciclib adyuvante a partir de los datos proporcionados por casi seis mil pacientes de ensayo, que recibieron al menos una dosis del tratamiento en estudio. Para ello, se analizó la incidencia de efectos adversos, su manejo clínico y el desenlace de los mismos, así como la calidad de vida percibida por las pacientes, teniendo en cuenta los síntomas experimentados y otras variables como el peso que tuvieron en su vida estos efectos adversos.

Una de las conclusiones más relevantes de este estudio, donde han participado investigadores del ibs.GRANADA, es que en pacientes con cáncer de mama de alto riesgo en su etapa inicial, con receptores de estrógenos positivos y Her-2 negativo, el tratamiento adyuvante combinando abemaciclib y terapia hormonal tiene un perfil de seguridad aceptable y buena tolerancia. Los resultados obtenidos muestran que combinar abemaciclib con la terapia endocrina, a pesar de que puede producir un aumento en la incidencia de efectos adversos, no implica que las pacientes sufran más complicaciones clínicas.

Todo esto, además, está apoyado por los resultados donde se evaluaba la percepción subjetiva del paciente que se manifiesta en todos los grupos de edad. A pesar de que los efectos adversos de este tratamiento, fueron mayores en el grupo que recibió el abemaciclib, se trató generalmente de problemas que solo se detectaron en las analíticas sanguíneas y que carecían de significancia clínica (como la elevación de las transaminasas o la neutropenia), que se pudieron revertir y gestionar utilizando medicación, reduciendo la dosis de abemaciclib o deteniendo temporalmente la administración del tratamiento.

Vea aquí la versión original.

señales cáncer de mama

Estas son las señales que avisan de un posible cáncer de mama

A pesar de todos los avances, la incidencia del cáncer de mama sigue aumentando. Esto es lo que ha afirmado la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) que explica que “el cáncer de mama supone el 28,9% del total de cánceres en las mujeres”. Por esta razón, es importante detectarlo con el tiempo suficiente para mejorar su pronóstico. A continuación te dejamos los síntomas que según los expertos pueden indicar la presencia de cáncer de mamá.

Hinchazón y enrojecimiento

Estos síntomas deben ser un motivo de consulta para realizar las pruebas que confirmen si estamos o no ante un cáncer inflamatorio de mama. Esto quiere decir, como detalla la doctora Ana Santaballa Bertrán, jefa de sección del Hospital La Fe de Valencia, que “el tumor se ha diseminado hasta la piel de la mama que aparece enrojecida, hinchada y caliente (…) porque las células tumorales bloquean los vasos linfáticos de la piel”.

Piel de naranja

Cuando se producen cambios en la textura de la piel de una o de las dos mamas aparece un incremento del grosor, densidad del tejido mamario y un aumento del volumen, como refiere el artículo Mama con “piel de naranja”: Presentación atípica, reporte de un caso. Esto puede ser un aviso sobre esta enfermedad.

Incluso, si la piel se muestra rugosa, con un aspecto distinto o si hay descamación en algunas partes, es importante comunicarle estos síntomas a un profesional de la salud. De esta manera, se corroborará si hay un cáncer de mama o cualquier otra alteración.

Secreción en el pecho

Entre los síntomas que van más allá de la detección de una protuberancia o bulto en alguno de los senos —o en ambos— está la secreción en el pecho. Esta no tiene relación con la maternidad, sino que se produce de manera aislada, en ocasiones, incluso sin la palpación de ninguna masa, como afirma la doctora Mariangela Espinosa Ramírez, médico de la Universidad de Ciencias Médicas (UCIMED). Si bien esto puede alertar sobre una infección, es crucial descartar que se trata de un cáncer.

Pesadez, ardor y dolor

Entre las señales de un cáncer de mama, la doctora Mariangela Espinosa Ramírez llama la atención sobre la sensación de pesadez que puede haber en las mamas acompañada de ardor y dolor. En ocasiones, incluso se incrementa la sensibilidad sin que esto esté relacionado con el ciclo menstrual o un posible embarazo. Por tanto, conviene estar atentas.

Hacerse una autoexploración mamaria no solo implica detectar bultos o protuberancias que puedan llamar nuestra atención, sino comprobar si las señales anteriores están o no presentes. Cualquier cambio, por pequeño que sea, debería ponerse en conocimiento de un médico. Pues, cuanto antes se detecte esta enfermedad, mejor.

Vea aquí la versión original.

Secreción en el pecho

Entre los síntomas que van más allá de la detección de una protuberancia o bulto en alguno de los senos —o en ambos— está la secreción en el pecho. Esta no tiene relación con la maternidad, sino que se produce de manera aislada, en ocasiones, incluso sin la palpación de ninguna masa, como afirma la doctora Mariangela Espinosa Ramírez, médico de la Universidad de Ciencias Médicas (UCIMED). Si bien esto puede alertar sobre una infección, es crucial descartar que se trata de un cáncer.

Pesadez, ardor y dolor

Entre las señales de un cáncer de mama, la doctora Mariangela Espinosa Ramírez llama la atención sobre la sensación de pesadez que puede haber en las mamas acompañada de ardor y dolor. En ocasiones, incluso se incrementa la sensibilidad sin que esto esté relacionado con el ciclo menstrual o un posible embarazo. Por tanto, conviene estar atentas.

Hacerse una autoexploración mamaria no solo implica detectar bultos o protuberancias que puedan llamar nuestra atención, sino comprobar si las señales anteriores están o no presentes. Cualquier cambio, por pequeño que sea, debería ponerse en conocimiento de un médico. Pues, cuanto antes se detecte esta enfermedad, mejor.

vida saludable cáncer de mama

Aumenta la evidencia científica sobre la relación entre el estilo de vida y el cáncer de mama

La dieta mediterránea podría reducir el riesgo de desarrollar un tumor de mama hasta en un 30% || El riesgo de las mujeres con una vida sedentaria de padecer cáncer de mama es un 71% más que el de las que realizan ejercicio físico

La relación existente entre el estilo de vida y el cáncer de mama está cada vez más respaldada por la evidencia científica, según ha quedado reflejado en el marco del XV Simposio Internacional del Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama.

“En GEICAM llevamos años poniendo de manifiesto el papel de la dieta y el ejercicio físico en el riesgo de desarrollar cáncer mama, como así demuestran los resultados del estudio ‘EpiGEICAM’, que revelan que la dieta mediterránea en las mujeres españolas podría reducir el riesgo de desarrollar un tumor de mama hasta en un 30 por ciento y que el riesgo de las mujeres con una vida sedentaria de padecer cáncer de mama es un 71 por ciento mayor al de aquellas que cumplen las recomendaciones internacionales de ejercicio físico”, ha dicho la directora del CIBER de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP), co-coordinadora del Grupo de Trabajo de GEICAM de Tratamientos Preventivos, Epidemiología y Cáncer Heredofamiliar, Marina Pollán.

De hecho, ‘EpiGEICAM’, uno de los “mayores” estudios epidemiológicos en cáncer de mama realizados en España, analiza los datos y hábitos de 1.017 mujeres recientemente diagnosticadas de este tipo de cáncer, para compararlos con los de otras 1.017 sin la enfermedad. Los últimos análisis de esta investigación arrojan nueva información al respecto como, por ejemplo, que el consumo de aceite de oliva virgen, cocinado y crudo, tiene un efecto protector frente al cáncer de mama.

Las dos investigaciones impulsadas por GEICAM también han aportado luz recientemente al conocimiento sobre el efecto del consumo de alcohol, que puede suponer una contribución desde el punto de vista de salud pública. “Los resultados de un subanálisis de EpiGEICAM indican que el alcohol, especialmente el que se consume en la adolescencia, está asociado a un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama, y que a mayor cantidad de alcohol acumulada a lo largo de la vida mayor es el riesgo”, ha subrayado Pollán.

También puede contribuir a diseñar estrategias preventivas en torno a esta enfermedad el estudio ‘Health EpiGEICAM’, publicado recientemente en la revista ‘Cancers’, cuyos resultados indican que las mujeres supervivientes de cáncer de mama, 10 años después del diagnóstico, presentan un cumplimiento moderado de las recomendaciones internacionales para la prevención del cáncer, mostrando una mayor adherencia a la recomendación de seguir una dieta rica en frutas y verduras y una adherencia bastante menor a la limitación del consumo de carnes rojas y procesadas.

“Estos datos son de gran interés para su integración en programas de prevención del cáncer, donde la evaluación periódica del grado de adherencia a las recomendaciones pueda ayudar a valorar la efectividad de dichos programas y facilitar la personalización de la atención a las supervivientes de cáncer de mama”, ha recalcado la doctora del Hospital Jerez de la Frontera (Cádiz), Natalia Chavarria.

Estos análisis son fruto de una investigación cooperativa y académica como la desarrollada por Grupo GEICAM. “Los grupos cooperativos oncológicos son cruciales en el desarrollo de los nuevos fármacos antitumorales, colaboran con la industria farmacéutica en los estudios de registro de fármacos y los complementan con otros que contestan preguntas no abordadas en dichos estudios”, ha argumentado el presidente de GEICAM, Miguel Martín.

El Grupo ha realizado, desde su fundación en 1995, una importante aportación científica, apostando por líneas de investigación específicas de los principales subtipos de cáncer de mama. “En el caso del cáncer de mama triple negativo, el más agresivo y el que cuenta con menos alternativas terapéuticas, fuimos el primer grupo que realizó un estudio adyuvante específico en esta población (con el estudio GEICAM-CIBOMA). Actualmente, seguimos la misma línea de trabajo, con estudios específicos en tumores luminales, HER2-positivos y triple negativos”, ha zanjado el doctor Martín.

Vea aquí la versión original.

anticonceptivos hormonales

Estudio indica que los anticonceptivos hormonales aumentarían el riesgo de cáncer de mama

Todos los anticonceptivos hormonales conllevan un riesgo ligeramente mayor de cáncer de mama, incluidos los que contienen solo progestágeno, cada vez más utilizados, según un estudio publicado este martes 21 de marzo.

Los investigadores que llevaron a cabo el estudio enfatizaron que el mayor riesgo de cáncer de mama debe sopesarse frente a los beneficios de los anticonceptivos hormonales, incluida la protección que brindan contra otras formas de cáncer femenino.

El aumento del riesgo de cáncer de mama ya era bien conocido para los métodos anticonceptivos que combinan progestágeno y estrógeno. Pero aunque el uso de anticonceptivos que contienen sólo progestágeno ha ido en aumento desde hace más de una década, hasta ahora pocas investigaciones se centraron en su efecto específico en el riesgo de cáncer de mama.

El nuevo estudio, publicado en la revista PLOS Medicine, encontró que el riesgo de que una mujer desarrollara cáncer de mama era aproximadamente el mismo para los anticonceptivos hormonales que tenían estrógeno y progestágeno que para los que solo tenían progestágeno.

De acuerdo con esta investigación, las mujeres que usan anticonceptivos hormonales tienen un riesgo aumentado de alrededor del 20 % al 30 % de desarrollar cáncer de mama, independientemente del modo en que los usan (píldora, DIU, implante o inyección), o la fórmula utilizada (estrógeno-progestágeno o progestágeno solo). Los hallazgos son similares a los publicados anteriormente, incluso en un vasto estudio de 1996.

Teniendo en cuenta que la probabilidad de cáncer de mama aumenta con la edad, los autores del estudio calcularon cuánto exceso de riesgo absoluto está asociado a los anticonceptivos hormonales. Para las mujeres que tomaron anticonceptivos hormonales durante un período de cinco años entre los 16 y los 20 años, representó ocho casos de cáncer de mama por cada 100.000. Entre 35 y 39 años fue de 265 casos cada 100.000, dijeron.

Riesgo transitorio

“Nadie quiere escuchar que algo que está tomando aumentará su riesgo de cáncer de mama”, dijo Gillian Reeves, profesora de la Universidad de Oxford y coautora del estudio. Pero “de lo que estamos hablando aquí es de un aumento muy pequeño en el riesgo absoluto”, subrayó durante una rueda de prensa.

Y agregó: “Estos aumentos en el riesgo de cáncer de mama, por supuesto, deben verse en el contexto de lo que sabemos sobre los muchos beneficios de tomar anticonceptivos hormonales”.

“No solo en términos de control de la natalidad, sino también porque sabemos que los anticonceptivos orales en realidad brindan una protección sustancial y a largo plazo contra otros cánceres femeninos, como el cáncer de ovario y el cáncer de endometrio”, dijo.

El estudio también confirmó, como otros, que el riesgo de cáncer de mama disminuye en los años posteriores a que una mujer deja de usar anticonceptivos hormonales.

Stephen Duffy, profesor de la Universidad Queen Mary de Londres que no participó en el estudio, describió los hallazgos como “tranquilizadores porque el efecto es modesto”.

El estudio involucró datos de casi 10.000 mujeres menores de 50 años que desarrollaron cáncer de mama entre 1996 y 2017 en el Reino Unido, donde el uso de anticonceptivos que sólo contienen progestágeno está tan extendido como el uso del método combinado.

Los anticonceptivos solo de progestágeno se recomiendan para mujeres en período de lactancia, que pueden tener riesgo de problemas cardiovasculares o fumadoras mayores de 35 años.

Entre los “múltiples factores” que explican el aumento de su uso, puede ser que “las mujeres ahora toman anticonceptivos más tarde” en sus vidas, y por lo tanto presentan más de estas condiciones de forma natural, señaló Reeves.

Vea aquí la versión  original.
cáncer de mama metastásico

Descubren cómo desactivar la ‘bomba de relojería’ del cáncer de mama metastásico

A pesar de que un cáncer de mama se haya curado, algunas de sus células que se han propagado a los pulmones pueden «despertar« después de años de sueño, formando tumores secundarios en su gran mayoría incurables. Ahora, un grupo de investigadores han desvelado por qué.

La investigación, que se publica en «Nature Cancer», revela el mecanismo que desencadena esta ‘bomba de relojería’ del cáncer de mama y, además, sugiere una estrategia para desactivarla.

«Este emocionante descubrimiento nos acerca un paso más a la comprensión de cómo podemos ralentizar o detener el desarrollo del cáncer de mama secundario ER+ en el pulmón. Tiene el potencial de beneficiar a miles de mujeres que viven con esta ‘bomba de relojería‘ en el futuro, asegurando que menos pacientes reciban las devastadoras noticias que la enfermedad se ha propagado», subraya Simon Vincent, director de investigación de Breast Cancer Now.